julio 18, 2007

Y tiene algo de malo?

  • Lilith representa el arquetipo de lo femenino negado por una cultura patriarcal y ha servido como estandarte del feminismo

  • Es la efigie del erotismo femenino, de la sexualidad desbordante y natural de la mujer que aparece intensamente atractiva, y a la vez, potencialmente peligrosa en los sueños de los hombres solos. "Lilith comparte la misma historia de las sirenas, las amazonas, las hetairas, todas ellas figuras femeninas que han intentado asumirse como mujeres libres, sin ninguna necesidad de someterse a los hombres".
    El nombre "Lilith" proviene del vocablo asirio-babilónico lilitu, "demonio femenino" o "espíritu del viento", que constituía parte de una tríada mencionada en los conjuros babilónicos

  • Lilitu era la representación de una "virgen de desolación", frígida, estéril, que vagaba de noche para atacar a los hombres como súcubo o bebiéndoles la sangre.

  • El mito hebreo cuenta una historia distinta pero profundamente asociada con la Lilith sumeria: Adán aburrido y celoso de que los animales tenían una pareja (hembra-macho) sugirió a Dios que remediara esa injusticia. Entonces Dios creó a Lilith de la misma manera que a Adán, aunque utilizando sedimento en lugar de polvo puro. La relación entre Adán y Lilith al parecer no resultó bastante grata para ambos y pronto empezaron a generarse diferencias, pues ambos poseían la misma fuerza.

  • Lilith y Caín ¿Rebeldes o revelaciones? Como podemos ver esta pareja constituye parte importante dentro de nuestra mitología judeocristiana puesto que su función no solamente es la de mostrar el castigo al rebelde, sino también la de la revelación de un orden que refleja la iniquidad de un sistema patriarcal y mitológico que justifica la represión de un género, edad, grupo racial o posición social. Nuestra civilización necesita que incorporemos estas figuras cuanto antes puesto que su expulsión simboliza la negación de nuestras facetas oscuras que, mientras sigan escondidas y sin incorporación a la psique, van a seguir manifestándose a través de la violencia, enfermedad, el caos y la destrucción que reinan en nuestros días. Es menester que comencemos a cambiar nuestra fragmentada manera de percibir a los demás y a nosotros mismos. Ha llegado la hora de quitarle su marca a Caín y de extraer del exilio a Lilith para hacer una sociedad más completa, que de expresión a todo aquél que decida manifestarse. http://www.cem.itesm.mx/dacs/publicaciones/logos/anteriores/n35/onajera.html
  • http://www.filosofia.buap.mx/Graffylia/1/67.pdf (ver también libros de Esther Cohen)